Fontanero Es Trasladado De Urgencia Al Hospital Tras Descubrir Un Cuadro Enmarcado De Sí Mismo En La Casa De Un Cliente
Eligiendo Su Carrera
Cuando Dana decidió ser enfermera, nunca pensó que su elección profesional la llevaría a conocer a su alma gemela. Siempre había sido una persona cerrada, con una timidez que le dificultaba hacer amigos.
Pero con él, todo había sido más fácil. La escuchaba atentamente sin interrumpirla y siempre estaba allí cuando ella quería verlo. Pero claro, esto se debía a que estaba en coma.
Dana Wheatfield
Dana Wheatfield conoció a Grant en la unidad de traumatología de su hospital local mientras terminaba la carrera de enfermería. Era uno de sus últimos días en el hospital cuando la ambulancia lo trajo.
Incluso ahora podía recordar aquella noche. Había llovido y las carreteras de todo el condado estaban resbaladizas y mojadas. Cuando los paramédicos lo trajeron, un hombre sin identificar, que parecía tener unos veinte años, había sufrido un traumatismo craneoencefálico masivo.
Su Atracción
Aunque es raro que los médicos se sientan atraídos por sus pacientes, la posibilidad nunca es nula. En el caso de Dana, su atracción por el hombre al que otras enfermeras llamaban Grant empezó como un simple flechazo.
Había vuelto al hospital después de graduarse y buscaba empezar su carrera profesional. Y ¿a quién más iba a dirigirla el hospital que a Grant, que seguía en coma?
Un Día En Su Vida
La rutina de Dana con Grant era bastante fácil. Venía por la mañana para comprobar sus constantes vitales, afeitarlo y asearlo. Después, se aseguraba de que recibiera los líquidos y los nutrientes necesarios antes de controlar su medicación diaria.
La rutina pronto se hizo aburrida y Dana empezó a hablar con él para mantener las cosas interesantes y animadas. Pero en esas conversaciones silenciosas, descubría algo que nunca había experimentado.
Pasando El Rato
Dana encontró una conexión con su paciente silencioso que no podía explicar. A medida que pasaban los meses, se sentía constantemente atraída por él, necesitando hablar o poner música suave en su habitación mientras pasaban los minutos.
Ni su familia ni sus amigos habían acudido a reclamarle, lo que encariñaba aún más a Dana. Pero un día, todo se detendría abruptamente.
Se Despertó
Habían pasado dos años desde que Grant ingresó en el hospital cuando se despertó. Dana había estado poniendo música en su habitación, pero cuando se levantó para cambiar la lista de reproducción, él le pidió de repente que repitiera la última canción.
Ella lo hizo antes de apresurarse a llamar a los médicos. Tras unas pruebas preliminares, la conclusión fue que el hombre tenía una grave pérdida de memoria a corto plazo, debida a su traumatismo craneal. Pero los médicos le aseguraron que recordaría con el tiempo. No tenían ni idea de qué secretos guardaba su mente.
Comienza Su Amistad
Como Grant no sabía nada de sí mismo y no tenía familiares ni amigos que lo ayudaran, aceptó de buen grado la ayuda de Dana cuando ella se ofreció a ayudarlo a aclimatarse a su nueva vida. Lo trasladó a otra habitación y le trajo libros para leer y canciones para escuchar.
Pero con el paso de las semanas, los dos empezaron a estrechar su relación. Daban largos paseos fuera del hospital por las tardes e iban al cine los fines de semana. Pronto quedó claro que entre ellos había algo romántico.
Más Profundo
Como haría cualquier enfermera en el lugar de Dana, intentó reprimir los incipientes sentimientos que sentía por Grant. Pero él la miraba y ella se sonrojaba, le hablaba y ella sonreía.
Él se alejaba de ella y un frío repentino la envolvía, manteniéndola cautiva hasta la próxima vez que volvieran a verse. Dana sabía que se había metido en un lío.
Un Conflicto De intereses
Los dos siguieron saliendo como de costumbre, y Dana reprimió los sentimientos que se agolpaban en su interior. Temía que se produjera un conflicto de intereses, ya que muchos seguían considerándola nada más que la enfermera de Grant.
Pero debería haberlo sabido, porque reprimir sus sentimientos era la peor manera de manejar la situación. No tardaría en estallarle todo en la cara.
No Era Fácil
Pasaron semanas en las que Grant y Dana salían juntos. Pero aunque Grant le estaba cogiendo el truco a todo lo que Dana le enseñaba, a Dana le estaba costando mucho mantener su treta.
Los pequeños sentimientos que antes había reprimido habían crecido en su interior y ahora se la estaban comiendo viva. Tenía que sincerarse o perder la cabeza. Pero tomar ese camino le acarrearía varios problemas.
Hablarlo
Con el paso de los meses, Dana decidió que tenía que confesar todo. Pero temía perder su trabajo o su credibilidad como enfermera si lo hacía. Como necesitaba hablar con alguien, se dirigió a uno de sus superiores, con el que siempre había mantenido una buena relación.
Tras varias conversaciones, su superior le aseguró que no había nada malo en lo que estaba haciendo. Según el hospital, Grant ya no estaba en estado crítico ni bajo el cuidado directo de Dana. Ella podía seguir viéndose con él sin detrimento para su carrera.
¿Debía Confesar?
Hablar con su superior le había quitado un peso de encima a Dana. Pero ahora tenía que sincerarse con Grant, lo que planteaba un problema.
Durante las muchas semanas que Dana y Grant habían pasado juntos, se habían hecho muy amigos. Pero por mucho que Dana quería que fuera más, era sólo platónico. ¿Estaría Grant abierto a llevar la relación al siguiente nivel, o dejaría de hablar con ella por sus insinuaciones?
Sin Rodeos
Esperando lo mejor, Dana rompió la venda de una vez por todas. Se lo confesó todo a Grant, contándole los agotadores días que había pasado a su lado con todos sus sentimientos reprimidos.
Le dijo que lo entendía si quería poner fin a su relación. Poco sabía ella que Grant estaba guardando su propio secreto, uno que cambiaría sus vidas para siempre.
Su Versión De Las Cosas
Grant le dijo a Dana que ella también le gustaba. Le reveló que durante los últimos días de su coma, podía oírla hablar con él. También oía las canciones que ella ponía a su lado.
Sin saberlo, se había encariñado con ella, imaginándola como un ángel de la guarda que le vigilaba y le guiaba en su interminable sueño. Confesó que su atracción sólo se había hecho aún más fuerte una vez que puso sus ojos en ella.
Avanzar En La Vida
Con sus confesiones, los dos superaron la barrera de la amistad y se convirtieron en algo que ninguno de ellos habría creído posible. Sus vidas se volvieron diez veces más brillantes, siempre llenas de risas y buenos momentos.
Incluso los compañeros de trabajo de Dana se alegraron por ella, diciendo que todos esperaban que los dos acabaran juntos, dado lo unidos que estaban incluso antes de que Grant despertara.
Viviendo Juntos
Grant se fue a vivir con Dana cuando el octavo mes llegaba a su fin. Todavía no sabía quién era, pero sabía que era muy bueno con las manos. Había demostrado una destreza inigualable en cualquier cosa que necesitara que se pusiera manos a la obra y sospechaba que había sido una parte importante de su vida anterior.
Pero vivir con el amor de su vida resultó ser más difícil de lo que esperaba. Dana necesitaba ayuda con las facturas y Grant tendría que conseguir un trabajo pronto. Esto abriría una caja de Pandora más grande de lo que los dos podrían haber imaginado.
A Trabajar
Gracias a los contactos de Dana, Grant encontró trabajo como ayudante de fontanero. Le encantaba arreglar cuartos de baño y el primo de Dana, que tenía un negocio de fontanería, necesitaba ayuda con algunos proyectos.
Con Grant a su lado, aceptaron un contrato en una de las mansiones más grandes de su ciudad, buscando ampliar la cartera de su empresa y conseguir para Grant algo de experiencia práctica. No tenían ni idea de lo que les esperaba en la casa.
La Mansión
Era una buena mañana cuando Grant y el primo de Dana se presentaron en la mansión para ir a trabajar. La casa era tan enorme como hermosa, pero más que eso, a Grant le pareció familiar.
Le quitó importancia y se puso a trabajar, pero cuanto más tiempo pasaba dentro de la mansión, más se sentía como si ya hubiera estado allí antes. Pronto, todo cobraría sentido.
Escaleras Arriba
Grant y la prima de Dana estaban almorzando cuando Grant fue al baño. Después de hablar un momento con el mayordomo de la mansión, que le había dirigido miradas extrañas durante todo el día, subió a toda prisa a una de las habitaciones de invitados.
Pero no había recorrido ni la mitad de la escalera de la mansión cuando su vista se posó en un imponente cuadro de sí mismo al otro lado del salón. Sus cejas se fruncieron, y entonces sucedió.
Los Recuerdos Le Invadieron
Como una avalancha que se precipita montaña abajo, los recuerdos asolaron su mente. Se apretó las sienes mientras el dolor aumentaba, viendo destellos de quién era antes de su lesión en la cabeza.
Vio una vida en la que había sido un pintor rico con pseudónimo. También había estado casado. Su vista se oscurecía con manchas negras a medida que el dolor se hacía insoportable. Y entonces, se despertó en la cama de un hospital.
He Wakes Up
Grant woke up with Dana by his side. He was back in his old room in the hospital, with medical equipment beeping by his side. Dana’s cousin, a doctor, an officer, and the mansion’s steward were also present.
Grant’s head was still in pain. But he could remember everything that had happened to him. He was about to talk when the officer interjected.
The Officer’s Report
The officer reported that Grant’s family filed a missing person’s report after they couldn’t find him for a week. They’d searched all over the country, from his penthouses to his favorite hotels but came up short. His family held a funeral service a year later.
But Grant could remember in excruciating detail what happened that fateful night and couldn’t wait to share his story.
What Really Happened
Before Grant could open up, he told Dana he needed to speak to her privately. His eyes dimmed with tears as he remembered his past self fully.
He had a wife that he loved, a beautiful woman he’d been dating well before he began his painting career. But he was with Dana now and wouldn’t keep her in the dark about who he used to be.
Telling Her
Grant shared his past. He told her about Esme, the woman he was married to. But he also revealed that although he didn’t feel any romantic attraction to her at the moment, he didn’t know what would happen once he saw her.
Dana’s eyes grew wet. She chewed on her bottom lip, listening to the man she loved reveal that he was married. But before she could get her head around everything, Grant revealed something that gave her hope.
It’s Over
“I don’t think Esme and I are on speaking terms,” shared Grant as he scratched his head. “I remember everything now.”
He asked Dana to call the rest of the people back in, stating that whatever he was about to say would need police in the vicinity. His tone had suddenly changed. This was a side of him that Dana rarely saw.
A Sad Reality
Grant explained that his accident hadn’t been an accident at all. His car’s brakes had been tampered with. He sat upright on the hospital bed, asking Dana to come to sit by her.
After she did, he told her that he and his wife had signed a prenup because of his financial situation. It had been her idea at first, but through their three-year marriage, he suspected she wasn’t being faithful to him.
Finding Out The Painful Truth
A few days before the accident, he discovered the truth about Esme. She had a relationship with Grant’s driver. Of course, Grant, whose real name was Danny McCallister, confronted her about it.
He learned that her dark ways spanned their years together and talked to her about filing a divorce. That was the last conversation the two had before Danny’s accident.
What She Did
Knowing the prenup barred her from getting a massive slice of Danny’s fortune, she sought to end his life. The police said they never found Danny’s car, which was still an open case back at the station.
He also shared that among Danny’s family, her wife acted odd when she found out he was alive. She’d left the country shortly after.
The Whole Truth
Grant explained that his car had veered off a sleek mountainside into a massive river because of the faulty brakes. He was confident it was under the charge of Esme.
He’d decided to jump out at the last minute. Dana revealed that the night the EMTs brought him in, they reported that a passerby found him bleeding in the thicket several feet from the river.
Choosing The One
The police issued an arrest warrant for Esme as they officially opened a case for her and Danny. On the other hand, Danny continued his relationship with Dana, introducing her to his family and moving her to his residence.
A few weeks later, the police located Esme. She signed the divorce papers and is facing several charges, one of which is attempted murder. Danny finally got his life back. But he knew everything that happened was for a reason: to lead him to the love of his life, who, despite knowing he had nothing, stayed by his side.
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